Muchos de nosotros pensamos mucho, especialmente acerca de gente y eventos, locales y globales, famosos y no famosos. Cuando siempre pensamos acerca de lo que está pasando en la superficie de la vida, lo visible, luego esto es como si viviéramos una una vida superficial. Y cuando dos personas viven en lo superficial y se juntan, el intercambio, la conversación es superficial, algunas veces totalmente sin significado. Muchas veces esto nos deja totalmente insatisfechos. Y cuando compartimos noticias de nuestra visión superficial, venimos a reconocer nuestra propia superficialidad, pero no somos lo suficientemente fuertes para resistirlo. En lo profundo de nosotros hay una voz un anhelo, un llamado a profundizar. Es nuestro corazón, recordándonos de visitar, explorar y expresar las profundidades de nosotros mismos.