La división entre lo que se dice y lo que se hace, entre lo que se promete y lo que se envía, es como un drenaje en el camino. El drenaje es donde el agua se escapa, así como su poder se irá si hay diferencia entre sus palabras y las acciones. Pregúntese a sí mismo cada día, ¿Fueron mis pensamientos, palabras y acciones alineadas? Pregúntele a alguien qué vió en usted. La retroalimentación es la comida de todo cambio positivo.